Review
Anticoagulation and antiaggregation: implications in the acute phase of stroke following ist, cast, toast, fiss and fiss bis
Anticoagulación y antiagregación: implicaciones en la fase aguda del ictus después del IST, CAST, TOAST, FISS y FISS bis
Rev Neurol 1999
, 29(8),
769–780;
https://doi.org/10.33588/rn.2908.99175
Abstract
INTRODUCTION One of the therapeutic strategies in the acute phase of cerebral ischaemia is the use of antiaggregants and anticoagulants. DEVELOPMENT. Until recently, their clinical use was empirical. It was based on the favourable results of clinical trials using these drugs in acute coronary ischaemia and the results of some preliminary clinical trials (although not the definitive trials) in the acute phase of cerebral infarct. These involved a small number of patients and randomization errors which did not definitely show the benefit/risk ratio, particularly in cases of bleeding of any origin. However, they served as a basis for further studies. Therefore, IST was done using anticoagulants in a large number of patients. It was randomized and open, using subcutaneous non-fractionated heparin without aTPT control. Use of heparin was associated with a significant number of haemorrhages without obvious net benefit, so should not be used in these conditions. Other trials used heparinoids (TOAST) or low molecular weight heparin (FISS and repeat FISS) and showed no benefit either. IST and CAST are trials involving antiaggregants. They included larger numbers of patients using an open, randomized design. The results showed benefit, with reduction in the early recurrence of ischemia, death and dependence. There was also a significant, but not very relevant, increase in recovery. CONCLUSION. In view of this data Aspirin in doses of 160-300 mg/d during the first 48 hours after onset of the cerebral infarct has been recommended
Resumen
Introducción Una de las estrategias terapéuticas en la fase aguda de la isquemia cerebral es la utilización de antiagregantes y anticoagulantes.
Desarrollo Hasta hace poco, su uso en esta situación clínica se basaba en el empirismo, debido a resultados favorables de ensayos clínicos que empleaban estos fármacos en la isquemia coronaria aguda y a los resultados de algunos ensayos clínicos preliminares, pero no definitivos, en la fase aguda del infarto cerebral. Éstos incluían un escaso número de pacientes y errores de aleatorización, no permitiendo definir claramente el balance beneficio/riesgo, fundamentalmente el sangrado de cualquier origen. Sin embargo, sirvieron de base al diseño de nuevos estudios. Así, con anticoagulantes, se realizó el IST que incluyó a un gran número de pacientes. Fue aleatorio y abierto, empleándose heparina no fraccionada subcutánea y sin control de TTPa. La utilización de heparina se asoció a un aumento significativo del número de hemorragias, sin beneficio neto evidente, por lo que no debe recomendarse su uso bajo estas premisas. Otros ensayos usaron heparinoides (TOAST) o heparinas de bajo peso molecular (FISS y FISS bis) y tampoco demostraron ningún beneficio. Respecto a ensayos con antiagregantes, tenemos el IST y el CAST, que incluyeron un gran número de pacientes, con un diseño aleatorio y abierto. Los resultados mostraron un beneficio, con reducción de las recurrencias precoces de isquemia y de la muerte o dependencia, así como un aumento de las recuperaciones, significativo pero poco relevante.
Conclusión De acuerdo con estos datos, se ha recomendado el uso de Aspirina en dosis de 160-300 mg/d en las primeras 48 horas del inicio del infarto cerebral
Desarrollo Hasta hace poco, su uso en esta situación clínica se basaba en el empirismo, debido a resultados favorables de ensayos clínicos que empleaban estos fármacos en la isquemia coronaria aguda y a los resultados de algunos ensayos clínicos preliminares, pero no definitivos, en la fase aguda del infarto cerebral. Éstos incluían un escaso número de pacientes y errores de aleatorización, no permitiendo definir claramente el balance beneficio/riesgo, fundamentalmente el sangrado de cualquier origen. Sin embargo, sirvieron de base al diseño de nuevos estudios. Así, con anticoagulantes, se realizó el IST que incluyó a un gran número de pacientes. Fue aleatorio y abierto, empleándose heparina no fraccionada subcutánea y sin control de TTPa. La utilización de heparina se asoció a un aumento significativo del número de hemorragias, sin beneficio neto evidente, por lo que no debe recomendarse su uso bajo estas premisas. Otros ensayos usaron heparinoides (TOAST) o heparinas de bajo peso molecular (FISS y FISS bis) y tampoco demostraron ningún beneficio. Respecto a ensayos con antiagregantes, tenemos el IST y el CAST, que incluyeron un gran número de pacientes, con un diseño aleatorio y abierto. Los resultados mostraron un beneficio, con reducción de las recurrencias precoces de isquemia y de la muerte o dependencia, así como un aumento de las recuperaciones, significativo pero poco relevante.
Conclusión De acuerdo con estos datos, se ha recomendado el uso de Aspirina en dosis de 160-300 mg/d en las primeras 48 horas del inicio del infarto cerebral
Keywords
Acute phase of stroke
Antiaggregation
Anticoagulation
Aspirin
Cerebral infarct
Clinical trials
Heparin
Heparinoids
Repeat FISS
Palabras Claves
Antiagregación
Anticoagulación
Anticoagulante
Aspirina
CAST
Ensayo
Ensayo clínico
Ensayo clínico aleatorizado
Ensayo clínico controlado
Ensayo clínico doblemente ciego
Ensayo clínico multicéntrico
Ensayos clínicos
Epidemiología
Epidemiología intervencionista
Evaluación
Fase aguda del ictus
FISS
FISS bis
Heparina
Heparinoides
Ictus isquémico
Infarto
Infarto cerebral
Infarto cerebral arterial
Infarto cerebral venoso
Infarto lacunar
Investigación
Isquemia cerebral
IST
Laguna
TOAST