La estimulación magnética transcraneal repetitiva podría ser útil como tratamiento no farmacológico para la espasticidad. Por ello, un estudio ha pretendido reevaluar el efecto clínico y los cambios neurofisiológicos que produce la estimulación theta-burst intermitente (ETBi) sobre la espasticidad de las extremidades inferiores en pacientes con esclerosis múltiple recurrente.
La muestra constaba de 17 pacientes en la fase remitente de la enfermedad, que fueron aleatoriamente asignados a un grupo placebo o a un grupo de tratamiento activo mediante estimulación magnética transcraneal repetitiva con protocolo ETBi sobre la corteza motora contralateral de la pierna más afectada. El procedimiento constaba de 10 sesiones diarias durante dos semanas. Cada sesión consistió en 10 ráfagas que contenían tres pulsos a 50 Hz repetidos a intervalos de 200 ms (5 Hz) cada 10 s para un total de 600 estímulos. El efecto de ETBi se evaluó mediante el uso de parámetros clínicos (como la escala de Ashworth modificada) y neurofisiológicos (ratio de amplitud H/M y duración del período cortical silente).
Dos semanas de ETBi sobre la corteza motora de la pierna más afectada no produjeron ningún efecto clínico significativo sobre la espasticidad en pacientes con esclerosis múltiple recurrente. Sin embargo, aunque de forma no significativa, se observó disminución de la ratio de amplitud H/M y un aumento de la duración del período cortical silente.
Según los autores, en términos de eficacia, el protocolo de estimulación utilizado no parece tener un efecto terapéutico significativo sobre la espasticidad en las extremidades inferiores en pacientes con esclerosis múltiple recurrente. Sin embargo, recomiendan estudios adicionales ya que los cambios neurofisiológicos fueron evidentes.
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