Introduction and objective. Massive usage of new neuroimaging techniques has produced an increase in the number of patients with cerebral venous thrombosis. Our aim has been to evaluate this shift in our county through the clinico-radiologic characteristics of the patients admitted to our unit. Material and methods. Over the last 7 years a total of 12 patients suffering from cerebral venous thrombosis were attended in our department. We have analyzed retrospectively their clinical records.Results. There were 11 women and 1 man with a range of ages from 13 to 60 years old. The main associated factor was oral contraceptives intake. Most of them presented with symptoms of benign intracranial hypertension. Magnetic resonance imaging

was the most sensitive diagnostic tool. Outcome was good in general. Most of them were treated with intravenous heparin during the acute phase and received oral anticoagulation for 6 months. More than half were diagnosed all over the last three years. Conclusions. Our data seem to confirm this tendency towards a larger number of cases with the application of new diagnostic tools. In these cases, clinical course is more benign than reported in classical series

Introducción y objetivo. La utilización masiva de las nuevas técnicas de neuroimagen ha propiciado un aumento en los casos de trombosis de senos venosos cerebrales. Nuestro objetivo ha sido analizar este cambio en nuestra región a través de las características clinicorradiológicas de los pacientes atendidos en nuestro hospital. Material y métodos. En los últimos 7 años hemos atendido a 12 pacientes afectados por trombosis de senos venosos cerebrales. Hemos revisado de forma retrospectiva sus historias clínicas.

Resultados Se trata de 11 mujeres y un varón con edades entre 13 y 60 años. El principal factor asociado ha sido el uso de contraceptivos orales. En la mayoría de los casos el inicio fue subagudo con un cuadro de hipertensión intracraneal benigna. La resonancia magnética fue la prueba diagnóstica más sensible. El pronóstico fue bueno en general. La mayor parte de los pacientes recibieron tratamiento con heparina iv en la fase aguda y anticoagulación oral durante seis meses. Más de la mitad de los casos se diagnosticaron en los últimos tres años.

Conclusiones Nuestros datos parecen confirmar esta tendencia a diagnosticar un mayor número de casos tras la aplicación de nuevas técnicas. Estos casos son en general de curso más benigno que el comunicado en series clásicas