Introducción La supresión del tratamiento antiepiléptico supone un reto importante para el epileptólogo ya que debe tomar una decisión que se orienta entre dos riesgos, el del mantenimiento crónico de los fármacos y el de la recurrencia de crisis.

Objetivo Efectuamos una revisión para tratar de sistematizar el proceso de decisión y el cálculo de las posibilidades de recurrencia.

Desarrollo Revisamos, en primer lugar, los factores a tener en cuenta en el proceso de decisión, que debe su complejidad al hecho de que los epilépticos constituyen un conjunto de pacientes muy heterogéneo. Resaltamos el respeto a la autonomía del paciente que es quien, en última instancia, debe asumir el correspondiente riesgo. A continuación, repasamos los factores a tener en cuenta en un cálculo individualizado de posibilidades de recurrencia y tabulamos un perfil teórico de no recurrencia. Finalmente, detallamos los aspectos metodológicos de la retirada.

Conclusiones Destacamos que el reto actual, en este tema, es el de diseñar un método de cuantificación de riesgos que permita predecir, de manera individualizada, las probabilidades de recurrencia de un paciente concreto. Citamos algunos ejemplos de sistematización y cuantificación de riesgos, y sugerimos que sólo mediante una iniciativa institucional –quizás en el seno de entidades de las que la LECE es un ejemplo– podría cubrirse la necesidad de nuevos estudios epidemiológicos de indudable rentabilidad científica a largo plazo

Introducción La supresión del tratamiento antiepiléptico supone un reto importante para el epileptólogo ya que debe tomar una decisión que se orienta entre dos riesgos, el del mantenimiento crónico de los fármacos y el de la recurrencia de crisis.

Objetivo Efectuamos una revisión para tratar de sistematizar el proceso de decisión y el cálculo de las posibilidades de recurrencia.

Desarrollo Revisamos, en primer lugar, los factores a tener en cuenta en el proceso de decisión, que debe su complejidad al hecho de que los epilépticos constituyen un conjunto de pacientes muy heterogéneo. Resaltamos el respeto a la autonomía del paciente que es quien, en última instancia, debe asumir el correspondiente riesgo. A continuación, repasamos los factores a tener en cuenta en un cálculo individualizado de posibilidades de recurrencia y tabulamos un perfil teórico de no recurrencia. Finalmente, detallamos los aspectos metodológicos de la retirada.

Conclusiones Destacamos que el reto actual, en este tema, es el de diseñar un método de cuantificación de riesgos que permita predecir, de manera individualizada, las probabilidades de recurrencia de un paciente concreto. Citamos algunos ejemplos de sistematización y cuantificación de riesgos, y sugerimos que sólo mediante una iniciativa institucional –quizás en el seno de entidades de las que la LECE es un ejemplo– podría cubrirse la necesidad de nuevos estudios epidemiológicos de indudable rentabilidad científica a largo plazo