The development of a variety of side effects associated with long-term treatment of Parkinson’s disease has prompted the introduction of new drugs and new treatment strategies. The use of dopamine agonists in combination with levodopa has proved to be useful in advanced patients with motor fluctuations. Recent studies indicate that the use of dopamine agonists in monotherapy from the early stages of the disease can be as effective as levodopa for clinical improvement with the added advantage of a significant less presentation of diskinesias. Ropinirol the first dopaminergic agonist demonstrating this effect in a 5-year controlled study, has well tolerance, both in combination or in monotherapy. Although low doses can be useful for individual patients, doses of approximately 15-16 mg/day proved to be safe and effective in long-term studies.

La aparición de una variedad de efectos secundarios asociados con el tratamiento a largo plazo de la enfermedad de Parkinson ha condicionado la búsqueda de nuevos medicamentos y estrategias farmacológicas. El uso de agonistas dopaminérgicos en asociación con levodopa se ha demostrado eficaz en pacientes avanzados con fluctuaciones motoras. Una serie de estudios recientes indican que el uso de agonistas dopaminérgicos en monoterapia desde las fases iniciales de la enfermedad puede ser tan eficaz como la levodopa para obtener la mejoría clínica de los pacientes, con la ventaja añadida de una significativa disminución en la presentación de discinesias. El ropinirol, el primer agonista en demostrar este efecto a largo plazo en un estudio controlado de cinco años de duración, es un fármaco muy bien tolerado tanto en monoterapia como asociado a levodopa. Aunque dosis menores también pueden ser útiles en función de la situación clínica de los pacientes, las dosis de 15-16 mg/día se han demostrado seguras y eficaces en los estudios a largo plazo.