Objetivo Los trastornos neuropsiquiátricos en la enfermedad de Parkinson más importantes y graves son las psicosis inducidas por fármacos. Su frecuencia es notable y están ligados a la sobreestimulación dopaminérgica de los fármacos administrados durante largo tiempo. Esta complicación aumenta la morbimortalidad de la enfermedad de Parkinson y su tratamiento resultaba muy difícil en el pasado, aunque los antipsicóticos atípicos han transformado su pronóstico.

Desarrollo Revisamos la farmacología general de los antipsicóticos atípicos, concretamente la clozapina y la olanzapina, con los que tenemos una amplia experiencia. Presentamos dos series con estos fármacos en la psicosis de la enfermedad de Parkinson. Nuestros estudios se desarrollaron con una metodología estricta y prospectiva, con escalas validadas para la psicosis y los signos motores de los pacientes. Se comprobó que ambos antipsicóticos atípicos mejoraron los síntomas positivos y negativos de los pacientes, produciendo un nulo o escaso empeoramiento de los signos motores de la enfermedad de Parkinson. Los efectos colaterales de los dos fármacos no fueron importantes. Se comparan nuestras dos series con otras de la literatura, con resultados similares en cuanto a mejorías de la psicosis y ausencia o escaso empeoramiento del Parkinson.

Conclusiones Las psicosis inducidas por fármacos en la EP son frecuentes y graves. La aparición de los antipsicóticos atípicos ha supuesto una auténtica ‘revolución’ en su tratamiento, por los buenos resultados sobre las psicosis y el escaso empeoramiento de los signos motores de la enfermedad de Parkinson.

Objetivo Los trastornos neuropsiquiátricos en la enfermedad de Parkinson más importantes y graves son las psicosis inducidas por fármacos. Su frecuencia es notable y están ligados a la sobreestimulación dopaminérgica de los fármacos administrados durante largo tiempo. Esta complicación aumenta la morbimortalidad de la enfermedad de Parkinson y su tratamiento resultaba muy difícil en el pasado, aunque los antipsicóticos atípicos han transformado su pronóstico.

Desarrollo Revisamos la farmacología general de los antipsicóticos atípicos, concretamente la clozapina y la olanzapina, con los que tenemos una amplia experiencia. Presentamos dos series con estos fármacos en la psicosis de la enfermedad de Parkinson. Nuestros estudios se desarrollaron con una metodología estricta y prospectiva, con escalas validadas para la psicosis y los signos motores de los pacientes. Se comprobó que ambos antipsicóticos atípicos mejoraron los síntomas positivos y negativos de los pacientes, produciendo un nulo o escaso empeoramiento de los signos motores de la enfermedad de Parkinson. Los efectos colaterales de los dos fármacos no fueron importantes. Se comparan nuestras dos series con otras de la literatura, con resultados similares en cuanto a mejorías de la psicosis y ausencia o escaso empeoramiento del Parkinson.

Conclusiones Las psicosis inducidas por fármacos en la EP son frecuentes y graves. La aparición de los antipsicóticos atípicos ha supuesto una auténtica ‘revolución’ en su tratamiento, por los buenos resultados sobre las psicosis y el escaso empeoramiento de los signos motores de la enfermedad de Parkinson.