Introducción Las cefaleas primarias constituyen una de las afecciones más prevalentes en neurología. La toxina botulínica tipo A (TBA) se utiliza desde hace años en la profilaxis de la cefalea crónica diaria (CCD) con pautas de infiltración y resultados variables.

Objetivo Determinar la eficacia preventiva y demostrar la rapidez, comodidad y tolerabilidad de una pauta subcutánea de TBA en la profilaxis de la CCD.

Pacientes y métodos 843 pacientes fueron infiltrados subcutáneamente con una técnica ‘dosis fija-sitio fijo’ de 100 U de TBA (Botox) en seis puntos pericraneales en períodos de al menos tres meses. Se valoró la reducción de la frecuencia media de crisis y días con cefalea, y del consumo de analgésicos y porcentaje de pacientes con reducción de más del 50% de la frecuencia media de crisis de cefalea.

Resultados La infiltración subcutánea de TBA produjo una reducción del 78,91 ± 6,81% en la frecuencia de crisis mensuales (p < 0,001) y una reducción del 62,38 ± 12,8% en los días mensuales con cefalea a los tres meses de la infiltración. El 92,8% de los pacientes refirió una reducción de al menos un 50% de los días con cefalea mensuales. La frecuencia media y el total de consumo de analgésicos se redujo de 21,48 ± 2,47 a 1,96 ± 1,27 (p < 0,001), y de 126,01 ± 24,7 a 6,65 ± 2,27 dosis, respectivamente. Hubo pocos efectos adversos, ninguno grave.

Conclusión La infiltración simplificada subcutánea de TBA es muy eficaz, cómoda, rápida y segura en la prevención de la CCD.

Introducción Las cefaleas primarias constituyen una de las afecciones más prevalentes en neurología. La toxina botulínica tipo A (TBA) se utiliza desde hace años en la profilaxis de la cefalea crónica diaria (CCD) con pautas de infiltración y resultados variables.

Objetivo Determinar la eficacia preventiva y demostrar la rapidez, comodidad y tolerabilidad de una pauta subcutánea de TBA en la profilaxis de la CCD.

Pacientes y métodos 843 pacientes fueron infiltrados subcutáneamente con una técnica ‘dosis fija-sitio fijo’ de 100 U de TBA (Botox) en seis puntos pericraneales en períodos de al menos tres meses. Se valoró la reducción de la frecuencia media de crisis y días con cefalea, y del consumo de analgésicos y porcentaje de pacientes con reducción de más del 50% de la frecuencia media de crisis de cefalea.

Resultados La infiltración subcutánea de TBA produjo una reducción del 78,91 ± 6,81% en la frecuencia de crisis mensuales (p < 0,001) y una reducción del 62,38 ± 12,8% en los días mensuales con cefalea a los tres meses de la infiltración. El 92,8% de los pacientes refirió una reducción de al menos un 50% de los días con cefalea mensuales. La frecuencia media y el total de consumo de analgésicos se redujo de 21,48 ± 2,47 a 1,96 ± 1,27 (p < 0,001), y de 126,01 ± 24,7 a 6,65 ± 2,27 dosis, respectivamente. Hubo pocos efectos adversos, ninguno grave.

Conclusión La infiltración simplificada subcutánea de TBA es muy eficaz, cómoda, rápida y segura en la prevención de la CCD.