Infection of the central nervous system by Epstein-Barr virus: clinical manifestations and prognosis
*Correspondencia: Dra. M. José Pena López. Servicio de Microbiología. Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín. c/Barranco de La Ballena, s/n. E-35020 Las Palmas de Gran Canaria.
E-mail: mpenlopd@gobiernodecanarias.org
Introduction: The role of Epstein-Barr virus (EBV) in central nervous system (CNS) infections is not fully resolved. We wanted to describe the clinical manifestations of patients with EBV infection in cerebrospinal fluid.
Patients and methods: We reviewed the clinical records of all adult patients EBV PCR-positive in cerebrospinal fluid, without lymphoproliferative disease, during 2004 to 2020.
Results: We identified 27 patients, 22 (81.5%) were men, and median age was 54 years. Twenty-three (82.1%) patients were immunosuppressed, 16 HIV-positive. In 15 (55.6%) patients coinfection with another microorganism was diagnosed and in 12 (44.4%) patients it was detected as the only pathogen. Of the 12 patients, three (25%) was immunocompetent patients, one had Guillain Barre syndrome (GBS), another had disseminated multiphasic encephalitis, and another had lymphocytic meningitis; 9 (75%) immunosuppressed, 7 HIV-positive, 4 had encephalitis that resolved without sequelae and 4 had encephalopathy, two HIH-positive had moderate cognitive impairment as a sequela.
Conclusions: In our study, EBV produced encephalitis, meningitis, polyradiculomyelitis and GBS, mainly in immunosuppressed patients. In more than half of the cases, it is associated with other pathogens where the role of EBV is unclear. In immunocompetent patient, the infection can be serious and leave sequelae and in HIV-positive patients with encephalopatic involvement without encephalitis, the neurological damage could be greater, so we consider it of interest to carry out studies to evaluate the prognosis as well as the role of antivirals in the evolucion of these clinical pictures.
Pacientes y métodos Se revisaron las historias clínicas de todos los pacientes adultos con detección del VEB en el LCR por reacción en cadena de la polimerasa diagnosticados desde 2004 hasta 2020 sin enfermedad linfoproliferativa.
Resultados Se diagnosticó a 27 pacientes, 22 (81,5%) hombres, con una mediana de 54 años; 23 (82,1%) pacientes eran inmunodeprimidos, 16 positivos para el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). En 15 (55,6%) pacientes, el VEB se detectó en coinfección con otro microorganismo, y en 12, como único patógeno. De los 12 pacientes, tres (25%) eran inmunocompetentes, uno presentó un síndrome de Guillain-Barré, otro una encefalitis diseminada multifásica y otro una meningitis linfocitaria; y nueve (75%) inmunodeprimidos, de los que cuatro presentaron encefalitis que se resolvieron sin secuelas, y cuatro encefalopatía, dos de ellos positivos para el VIH, que presentaron secuelas (deterioro cognitivo moderado).
Conclusiones En nuestro estudio, el VEB produjo cuadros de encefalitis, meningitis, polirradiculomielitis y SGB, principalmente en inmunodeprimidos. En más de la mitad de los casos se asocia a otros patógenos, en donde el papel del VEB no está claro. En inmunocompetentes, las infecciones pueden ser graves y dejar secuelas, y en pacientes con VIH con encefalopatía sin encefalitis, el daño neurológico podría ser mayor, por lo que consideramos de interés realizar estudios que evalúen el pronóstico y el papel de los antivirales en la evolución de estos cuadros clínicos.