Original

¿Cómo afecta el metilfenidato al circuito de activación por defecto? Revisión sistemática

P.H. Santos, R. Gonçalves, S. Pedroso [REV NEUROL 2019;68:417-425] PMID: 31070233 DOI: https://doi.org/10.33588/rn.6810.2018487 OPEN ACCESS
Volumen 68 | Número 10 | Nº de lecturas del artículo 155.635 | Nº de descargas del PDF 731 | Fecha de publicación del artículo 16/05/2019
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RESUMEN Artículo en español English version
Introducción El metilfenidato es un fármaco ampliamente usado como tratamiento del trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH) y otros trastornos neuropsiquiátricos. La dificultad para mantener la atención de forma prolongada y la deficiente ejecución de tareas que caracterizan a tales trastornos se han vinculado a la disfunción del circuito de activación por defecto --default mode network (DMN)--, revelado en estudios de resonancia magnética funcional. En los individuos sanos, el DMN y la red orientada a tareas (task-positive network) presentan una relación inversa. Se ha planteado que el metilfenidato revertiría la escasa desactivación del DMN durante la ejecución de tareas que caracteriza a los trastornos de la atención y del control inhibitorio, normalización que a su vez mejoraría la ejecución de las tareas.

Pacientes y métodos Con objeto de examinar la hipótesis de que este fármaco propicia tal desactivación, se llevó a cabo una revisión sistemática de la bibliografía.

Resultados Doce estudios se incluyeron finalmente en la revisión. Para ello, debían haber medido los efectos de la administración del metilfenidato sobre la actividad del DMN. Once estudios mostraron indicios de mejora atribuible al metilfenidato en áreas cerebrales vinculadas a dicho circuito. Los resultados indican la normalización de los circuitos cerebrales en los pacientes con disfunción del DMN.

Conclusiones Los hallazgos preliminares ofrecen indicios sólidos de que el metilfenidato mejora la disfunción del DMN presente en el TDAH y otros trastornos neuropsiquiátricos. Se precisan nuevos estudios que diluciden los pormenores de este efecto y mejoren la comprensión sobre los mecanismos de acción del metilfenidato.
Palabras claveCircuito de activación por defectoDMNEstado de reposoMetilfenidatoNeurocienciaPsicofarmacologíaTDAHTrastorno por déficit de atención/hiperactividad CategoriasNeurociencia básicaNeuropsiquiatría
TEXTO COMPLETO Artículo en español English version

Introducción


Mecanismo de acción del metilfenidato y evidencia terapéutica


El metilfenidato es un fármaco ampliamente usado como tratamiento del trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH) y de otros trastornos neuropsiquiátricos, con el fin de fomentar la atención y las facultades cognitivas, como son la reducción del tiempo de reacción, la mejora de la sensibilidad perceptiva, la memoria operativa, la velocidad de procesamiento, el aprendizaje verbal, la atención y el estado de alerta [1-4]. El metilfenidato bloquea los transportadores de la dopamina y de la noradrenalina, lo cual reduce la recaptación presináptica que tiene lugar tras la liberación y aumenta la concentración extraneuronal de estos neurotransmisores neuromoduladores en la hendidura sináptica [5-7]. Los ganglios basales, principalmente el estriado, los lóbulos frontales y el cerebelo serían algunas de las zonas del encéfalo donde actúa [8,9].

Las últimas directrices para el TDAH recomiendan el metilfenidato como tratamiento farmacológico de primera línea [10], y si bien la fisiopatología del trastorno no se conoce con exactitud, sí se sabe desde hace tiempo que los estimulantes pueden paliar los síntomas de inatención y de hiperactividad en los niños afectados [11,12]. Diversas investigaciones le atribuyen asimismo posibilidades como tratamiento contra la adicción a la cocaína y la narcolepsia, así como en la recuperación de los traumatismos craneoencefálicos [13-15]. Su prescripción ha experimentado un enorme auge en los últimos veinte años [16]. En cuanto a las reacciones adversas, los datos referentes a problemas de seguridad indican que, pese a su frecuencia, son leves, tanto en los pacientes pediátricos como en adultos [17-19].

Componentes del circuito de activación por defecto y trastornos funcionales relacionados


El circuito de activación por defecto –default mode network (DMN)– forma parte de los descubrimientos accidentales de la ciencia [20]. Ignorado en un principio [21], sus funciones se han deducido paulatinamente, tanto en la integración de los procesos emocionales y cognitivos como en la planificación prospectiva a través de la recuperación de la memoria episódica [22,23]. Las regiones que en principio integran el DMN son la corteza prefrontal ventromedial y ventrolateral, la corteza cingulada posterior, el cúneo y el lóbulo parietal inferior [24]. El DMN es un circuito cerebral que se activa sobre todo en reposo, cuando el sujeto no está concentrado en ninguna tarea concreta, y se desactiva cuando se está ejecutando una tarea externa; la magnitud de la desactivación se asocia con el esfuerzo y la implicación que exige, con la carga que supone para la memoria y con la frecuencia del estímulo [24-28]. El DMN y la red orientada a tareas –task-positive network (TPN)­– presentan una relación inversa en el curso de las tareas que exigen dirigir la atención al exterior [29-32]. La coordinación entre ambas redes parece necesaria para lograr un control inhibitorio eficiente [33].

La disfunción del DMN se ha vinculado con procesos mentales anormales y trastornos mentales como el TDAH o los traumatismos craneoencefálicos [34-36]. Entre los principales procesos neurofisiológicos anormales vinculados con tal disfunción destacan los déficits de la atención y del control inhibitorio (control de impulsos). Los déficits de atención sostenida propios del TDAH no tardaron en asociarse con la alteración de la coherencia del DMN, en particular con su actividad interferente [29]. La deficiente ejecución de tareas apareció asociada con la incapacidad para atenuar la actividad del DMN en el curso de dicha ejecución, sobre todo si las tareas requerían una atención notable [37-39]. La variabilidad en el tiempo de respuesta resulta más acusada cuando la relación inversa entre el DMN y la TPN es más débil [30].

Disfunción del DMN y tratamiento con metilfenidato


El metilfenidato ha demostrado ser claramente un tratamiento eficaz contra el TDAH, por lo que las directrices al respecto lo recomiendan como fármaco de elección en este trastorno [10]. También se han descrito mejoras en los síntomas de la narcolepsia y de los traumatismos craneoencefálicos con su administración [14,15]. La alteración de la actividad del DMN se ha confirmado tanto en el TDAH como en el caso de la narcolepsia y de los traumatismos craneoencefálicos [31,36,40].

Un pequeño número de estudios ha descrito la interacción del metilfenidato con la actividad del DMN. Peterson et al demostraron que, en pacientes con TDAH, su administración normalizaba la desactivación del DMN que en circunstancias normales tiene lugar durante la ejecución de una tarea [41]. Además, Volkow et al llegaron a la conclusión de que la disminución de la demanda de glucosa en el cerebro durante la ejecución de una tarea cognitiva en voluntarios sanos que tomaban metilfenidato obedecía a la mejora de la desactivación de las regiones que conforman el DMN [42].

Con el fin de investigar la hipótesis de que la administración de metilfenidato facilita la desactivación del DMN, se llevó a cabo una revisión sistemática de la bibliografía. Se esperaba que los resultados pudieran esclarecer las funciones del DMN en los trastornos de la atención y del control inhibitorio y mejorar los conocimientos acerca del mecanismo de acción de este fármaco. En nuestro conocimiento, no existe revisión alguna sobre el tema.
 

Pacientes y métodos


Criterios de búsqueda


Se llevó a cabo una búsqueda sistemática en las bases de datos PubMed y Cochrane hasta octubre de 2018. Los términos introducidos en los campos de título y texto fueron los siguientes: ‘methylphenidate’ combinado con ‘default mode network’. La búsqueda se limitó a los estudios de investigación originales que se hubieran publicado en inglés en revistas cuyo contenido se somete a revisión externa. A continuación, se procedió a examinar los títulos y los resúmenes hallados en la búsqueda y decidir los artículos que eran relevantes.

Criterios de inclusión y exclusión


Los estudios debían cumplir estas condiciones:
 
  • Ser ensayos clínicos con seres humanos, incluidos ensayos clínicos controlados y aleatorizados, ensayos sin aleatorización, descripciones de casos clínicos o series de casos.
  • Evaluar el efecto directo de la administración del metilfenidato sobre el funcionamiento del DMN.
  • Estar redactados en lengua inglesa.

En cambio, quedaron excluidos si:
 
  • No daban a conocer datos novedosos o propios (artículos de revisión, cartas al director o artículos duplicados).
  • No presentaban un criterio de valoración relacionado con el efecto sobre el DMN.
  • No usaron el metilfenidato para evaluar los resultados de los participantes.

En la primera fase del proceso de selección se excluyeron todos aquellos artículos cuyo título o resumen no cumplía los criterios de admisión. De los 28 hallados en un principio, 14 quedaron descartados. En la segunda fase se leyó el texto íntegro de los artículos restantes y se excluyeron los que no eran relevantes para esta revisión. En última instancia, se excluyeron dos artículos más por no presentar ninguna medición de la actividad del DMN tras la administración del metilfenidato. Así pues, la revisión final englobó 12 artículos.

La revisión sistemática se ha efectuado siguiendo los criterios de las directrices PRISMA. El proceso de búsqueda se resume en la figura.

 

Figura. Diagrama de flujo de la selección de estudios para su inclusión en la revisión sistemática.






 

Resultados


Características de los estudios incluidos


Se seleccionaron 12 estudios que abordaban los efectos del metilfenidato en áreas del DMN, con 480 participantes en total. Las características demográficas y clínicas de las muestras resultaron sumamente heterogéneas y en tres estudios no se indicó la media de edad de los participantes. En los demás, la media varió entre 8,78 ± 0,85 y 39,9 ± 5,5 años; cinco estudios contaron únicamente con pacientes pediátricos. En cinco participaron únicamente varones y en todos los incluidos en la revisión había un predominio desproporcionado del sexo masculino. Las características clínicas de la muestra también variaron en los estudios examinados. Si bien en la mayoría de ellos se investigó la administración del metilfenidato en pacientes con TDAH (en cinco no habían recibido nunca este fármaco, en dos eran pacientes que habían respondido a él y en otro habían sido tratados con él pero se habían sometido a un período de reposo farmacológico), en dos estudios se administró a voluntarios sanos, en uno la muestra consistió en pacientes cocainómanos, y en el último participaron pacientes que habían sufrido hacía siete meses un traumatismo craneoencefálico con daño axonal difuso.

Hubo igualmente una amplia variabilidad en la metodología y en las regiones cerebrales analizadas. Nueve estudios eran controlados y tres carecían de grupo control. En cinco se administró placebo en el grupo experimental o en el grupo control. La vía oral fue la más utilizada; solo en un estudio se optó por la vía intravenosa. En tres se intentaron analizar los efectos a largo plazo del metilfenidato mediante una evaluación al cabo de más de un mes de tratamiento.

En diez estudios, la actividad del DMN se evaluó mediante imágenes de resonancia magnética funcional, en uno se empleó el electroencefalograma, y en el restante, el potencial evocado visual en estado de equilibrio. La mayoría evaluó los efectos del metilfenidato sobre el funcionamiento del DMN durante la ejecución de una tarea neuropsicológica (que exigía atención visual, control inhibitorio o memoria operativa), mientras que dos evaluaron sus efectos únicamente durante el estado de reposo.

En la tabla se presentan las características detalladas de los estudios.

 

Tabla. Resumen de los estudios incluidos en la revisión sistemática.
 
Muestra

Intervención

Hallazgos principales en cuanto a la actividad del DMN tras la administración de MTF

Pacientes (MTF)

Controles

Tomasi
et al [43]


16 varones sanos (edad media: 33 ± 3 años)

16 varones sanos (edad media: 36 ± 2 años)

Pacientes: administración oral de 20 mg de MTF

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

Liddle
et al [44]


18 con TDAH-C subtipo respondedor al MTF (9-15 años)

18 con desarrollo normal (9-15 años)

Pacientes: administración regular de MTF oral y 36 h después de dejar de recibirlo, en diversas condiciones de motivación

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

Marquand
et al [45]


15 sanos (20-39 años)



Pacientes: administración oral de 30 mg de MTF y placebo

Desactivación

Matuskey
et al [53]


10 cocainómanos, según criterios DSM-IV-R (8 varones; edad media: 39,9 ± 5,5 años)



Pacientes: administración intravenosa de MTF (0,5 mg/kg) y de placebo

Aumento de la activación: normalización de los
procesos neurológicos

Querne
et al [46]


11 con TDAH no tratados antes con MTF (8-13 años; edad media: 9,8 ± 1,7 años)

11 con desarrollo normal (8-13 años; edad media: 10,8 ± 1,7 años)

Pacientes: efectuada dos veces, antes del MTF y tras un mes de tratamiento continuo (20 o 30 mg, formulación de liberación prolongada)

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

Cooper
et al [47]


38 varones con TDAH no tratados y 17 en seguimiento (con MTF) (18-58 años;
edad media: 28,5 ± 9,5 años)

43 varones sin TDAH y 34 en seguimiento (19-65 años; edad media: 29,0 ± 10,4 años)

Pacientes: examinados antes de comenzar el tratamiento con MTF y durante el seguimiento con MTF (media del seguimiento: 9,4 meses)

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

Salavert
et al [48]


41 con TDAH: 26 en tratamiento crónico con MTF y 15 sin tratamiento hasta entonces (28 varones y 13 mujeres)

41 sanos

Pacientes: retirada del MTF como mínimo 4 días antes de la resonancia magnética funcional

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

Battel
et al [54]


23 niños con TDAH que no habían recibido nunca MTF (8-10 años; edad media: 8,78 ± 0,85 años); 21 a los 6 meses de seguimiento



Pacientes: tratamiento con MTF ajustado de modo individual (dosis deseada de 1 mg/kg/día)

Diferencia no significativa

Silk et al [49]

16 varones con TDAH: 10 no habían recibido nunca MTF, 6 con 48 h de lavado del MTF
(9-18 años; edad media: 13,4 ± 2,4 años)

15 varones con desarrollo normal (edad media: 14,4 ± 2,5 años)

Pacientes: dosis única de 20 mg de MTF y de placebo (con dos semanas o más de separación entre ambos)

Controles: placebo

Desactivación

Moreno-López
et al [50]


14 pacientes con más de 7 meses de un traumatismo craneoencefálico con daño
axonal difuso: 10 varones y 4 mujeres (edad media: 36,86 ± 14,17 años)

20 sanos: 12 varones y 8 mujeres (edad media: 34,15 ± 11,12 años)

Pacientes: 30 mg de MTF oral y placebo

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

Silberstein
et al [51]


42 niños con TDAH sin tratamiento previo (edad media: 10,04 ± 2,00 años)

25 niños sanos (edad media: 10,83 ± 1,74 años)

Pacientes: 0,3 mg/kg de peso de MTF

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

Mowinckel
et al [52]


20 adultos con TDAH en tratamiento con MTF: 7 varones y 13 mujeres (edad media: 29,90 ± 1,41 años)

27 adultos sanos: 8 varones y 19 mujeres (edad media: 27,42 ± 1,23 años)

Pacientes: administración del MTF y del placebo en un orden determinado aleatoriamente

Controles: sin intervención farmacológica

Desactivación

DMN: circuito de activación por defecto (default mode network); MTF: metilfenidato; TDAH: trastorno por déficit de atención/hiperactividad.

 

Efectos del metilfenidato sobre la actividad del DMN


Once estudios constataron que la administración del metilfenidato influía sobre la actividad de las áreas cerebrales pertenecientes al DMN. En diez se señaló el aumento de la desactivación de ciertas áreas del circuito tras la administración del fármaco [43-52]. El estudio cuya muestra consistía en pacientes cocainómanos reveló que el metilfenidato aumentaba la activación de la corteza prefrontal ventromedial y del precúneo antes de cometer errores en la tarea, de lo cual se infiere la normalización de los procesos neurológicos [53]. Un estudio no halló diferencia alguna en la actividad del DMN antes y después de la administración del metilfenidato [54].

En la decena de estudios en que el metilfenidato propició la desactivación del DMN, se observaron efectos en diversas áreas del circuito: en cuatro estudios, la corteza cingulada posterior; en dos, la corteza prefrontal; en uno, la corteza frontal medial; en uno, el lóbulo de la ínsula; en tres, el precúneo; en uno, la corteza cingulada anterior ventral; en uno, las circunvoluciones temporales; en uno, las circunvoluciones angulares; en uno, las regiones frontoparietales; y en uno, otras áreas de las regiones occipitales, temporales y cerebelares.
 

Discusión


En esta revisión sistemática se identificaron 12 estudios destinados a examinar los efectos de la administración del metilfenidato en el funcionamiento del DMN. En cuanto a los trastornos de los participantes, ocho estudios contaron con pacientes con TDAH; uno, con adictos a la cocaína; otro, con pacientes con traumatismo craneoencefálico, y dos, con voluntarios sanos. Los diagnósticos observados y su distribución resultaron los previsibles, ya que el TDAH es el principal trastorno tratado con el metilfenidato y es uno de los trastornos con disfunción del DMN mejor estudiados. La hipótesis acerca de la actividad interferente del DMN en el TDAH descansaba en la descripción de una conectividad funcional anómala entre el DMN y otras regiones encefálicas y en la reducción de la homogeneidad del DMN, tanto en niños como en adultos afectados por el TDAH [31,55,56]. Un metanálisis señaló la hiperactividad del DMN como uno de los principales hallazgos en los grupos con TDAH respecto a los controles [57]. En jóvenes con este trastorno, se halló que la desactivación del DMN que de ordinario tiene lugar durante la ejecución de una tarea era menor de lo esperado en el curso de una tarea de control inhibitorio [41]. En poblaciones con traumatismo craneoencefálico se ha descrito una conectividad anormalmente alta del DMN y una conectividad reducida entre la red de saliencia y el DMN durante la ejecución de tareas de inhibición de respuestas [58-60]. La disfunción del DMN también se ha asociado con una inhibición más lenta de la respuesta en los pacientes con tales traumatismos [61].

El DMN es un circuito cerebral que permanece activo en estado de reposo y se desactiva cuando se emprende una tarea externa [24]. Los individuos que presentan un fallo en la atenuación de la actividad del DMN durante el curso de tareas externas presentan una ejecución peor de estas [37]. Así, por ejemplo, la disminución de la desactivación del DMN apareció asociada con errores en una tarea de control inhibitorio [62]. Asimismo, la variabilidad intraindividual del tiempo de respuesta durante una tarea también se asociaba con la activación del DMN [63]. En esta revisión, nueve de los diez estudios en que participaron pacientes señalaron la restauración de la actividad del DMN tras la administración de metilfenidato. En ocho de ellos, la restauración quedó reflejada en la desactivación del DMN. Resulta interesante que en los dos estudios que solo contaron con voluntarios sanos el patrón de actividad funcional coincidiese. En cuanto a las áreas concretas del DMN que quedaron desactivadas, la corteza cingulada posterior fue la más citada. La corteza cingulada posterior constituye el DMN central, un conjunto de áreas que se desactiva con independencia de la tarea en cuestión [64]. La corteza prefrontal, la corteza frontal medial, el precúneo, la corteza cingulada anterior ventral, las circunvoluciones temporales y las circunvoluciones angulares también resultaron desactivadas por efecto del metilfenidato. Querne et al examinaron la actividad del DMN antes de administrar metilfenidato y al cabo de un mes de tratamiento, en ambos casos mientras los participantes desempeñaban una tarea con es­tímulos distractores (flankers) [46]. Sus resultados indican que la ausencia inicial de relación inversa entre las actividades del DMN y de la TPN dio paso a la consolidación de esa relación al mes de tratamiento con metilfenidato, algo similar a lo observado en el grupo control. De hecho, las regiones del TPN se activan con la atención deliberada [65,66]. Puesto que la relación inversa del DMN con la TPN es necesaria para que las tareas externas se ejecuten debidamente, el fomento de la desactivación del DMN por parte del metilfenidato parece normalizar el funcionamiento de la TPN.

En el estudio con pacientes cocainómanos se constató la normalización de los procesos neuronales con la restauración de la actividad normal del DMN, pese al aumento de la activación de este circuito con el metilfenidato [53]. Los autores hallaron un aumento de su actividad que precedió a errores de parada en una tarea que incluía señales de este tipo (stop-signal task) mientras recibían metilfenidato. Este hallazgo concuerda con la bibliografía, pues se ha sugerido que en individuos sanos es posible predecir los errores de ejecución a través de la activación del DMN, a tenor del aumento de la actividad en estructuras clave de este circuito cuando se cometen errores ante la señal de parada, en contraste con la actividad observada cuando la señal se interpreta correctamente [62]. De igual modo, la administración intravenosa de metilfenidato mejoró el control inhibitorio en cocainómanos que no recibían tratamiento contra su adicción [67]. En conjunto, estos hallazgos respaldan la eficacia de los psicoestimulantes en la potenciación del autocontrol en el cocainómano [68-70].

Un solo estudio no logró confirmar la normalización de la actividad del DMN por el metilfenidato [54]. Es preciso señalar que fue el único que no dispuso de un grupo control, no contempló la administración de placebo al grupo de pacientes, ni la ejecución de una tarea.

Silk et al llevaron a cabo su estudio en estado de reposo, pero aun así, hallaron una actividad reducida del DMN mientras se administraba el metilfenidato, en comparación con el placebo [49]. Datos previos demuestran alteraciones manifiestas del estado de reposo por la acción del metilfenidato, efectos que presumiblemente están vinculados con la diferenciación de la señal respecto al ruido y con la restauración de la atención [71-73]. Los resultados de los dos estudios en que participaron únicamente voluntarios sanos coinciden con los efectos esperados del metilfenidato en cuanto a su actividad sobre el DMN [43,45]. De hecho, este fármaco ya había mostrado indicios de ello en modelos de inhibición de respuestas, tanto en poblaciones psiquiátricas co­mo sanas [74,75].

Limitaciones


La interpretación de los resultados de esta revisión debería contemplarse a la luz de ciertas limitaciones que conviene tener presentes. En primer lugar, la revisión adolece de limitaciones en cuanto a los estudios, debido a las diferencias en calidad y metodología de los ensayos seleccionados. En la bibliografía no aparecen aún estudios ni datos relevantes referentes a los efectos específicos del metilfenidato en el DMN y en otras regiones cerebrales. Y en lo que atañe al tipo de estudios, en un principio se buscaron ensayos clínicos controlados y aleatorizados, pero dada su escasez nos vimos obligados a redefinir los criterios de inclusión y aceptar otros diseños experimentales, algunos desprovistos de grupos control, administración de placebo o medidas doble ciego.

Asimismo, el análisis de los datos disponibles se ve dificultado por la heterogeneidad de las poblaciones estudiadas. Si bien en la mayoría de estudios se admitieron únicamente pacientes con TDAH que se compararon con muestras compuestas por individuos de desarrollo normal, algunos evaluaron el efecto del metilfenidato en poblaciones heterogéneas, como adictos a la cocaína o afectados por un traumatismo craneoencefálico. Incluso en los que contaron con pacientes con TDAH, las poblaciones resultaron notoriamente heterogéneas. En algunos se comenzó a administrar el metilfenidato a pacientes que no lo habían recibido nunca, mientras que en otros se optó por pacientes con TDAH que ya habían sido tratados y habían respondido al fármaco, e incluso en otros se mezclaron pacientes de ambos tipos. La heterogeneidad de las muestras es también importante en cuanto a la edad, con un intervalo notablemente amplio en el conjunto de los estudios.

En la mayor parte de los estudios predominó el sexo masculino en la muestra, lo cual exige cautela a la hora de generalizar los resultados a la población femenina.

Otra dificultad adicional para la comparación de los estudios reside en la heterogeneidad de las metodologías aplicadas en el análisis de los efectos del metilfenidato sobre la actividad del DMN, los instrumentos y las técnicas de medición, así como las unidades y los procedimientos estadísticos empleados. Los estudios analizaron en su mayoría el efecto del metilfenidato sobre el circuito durante la ejecución de una tarea neurocognitiva, pero algunos examinaron ese efecto en estado de reposo, lo que pudo minimizar sus resultados, pues no permitieron observar la desactivación del DMN en el curso de una tarea que exigiera atención externa.

Por último, en cuanto a las limitaciones inherentes a la revisión, la inclusión exclusiva de publicaciones escritas en inglés podría haber descartado involuntariamente artículos relevantes, aunque la búsqueda bibliográfica fue exhaustiva y sistemática.
 

Conclusiones


En esta revisión sistemática hallamos pruebas favorables del efecto del metilfenidato en diversas áreas del DMN, en múltiples poblaciones clínicas, lo que respalda la bibliografía previa en este campo. En general, el metilfenidato consiguió normalizar la relación inversa entre el DMN y la TPN, necesaria para la correcta ejecución de las tareas externas.

Los datos siguen siendo escasos tanto en calidad como en número de estudios. Se precisan nuevos estudios controlados y bien diseñados, con muestras grandes y comparación con placebo, que analicen los efectos del metilfenidato sobre el DMN durante la ejecución de una tarea homogénea que exija atención. Tales estudios ofrecerían pruebas de la calidad suficiente para avalar esos resultados y un metanálisis posterior.

 

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How does methylphenidate affect default mode network? A systematic review

Introduction. Methylphenidate is a widely-used drug for the treatment of attention deficit/hyperactivity disorder (ADHD) and other neuropsychiatric disorders. Sustained-attention deficits and poorer task performance in these disorders have been associated with default mode network (DMN) dysfunction in fMRI studies. DMN is a set of brain areas more activated during the resting-state. Under the execution of external tasks, there is an attenuation of DMN activity. In healthy individuals, DMN and task-positive network are anticorrelated. It has been suggested that methylphenidate could normalize the attenuated task-related DMN deactivation in attention- and inhibitory control-related disorders and that such normalization could improve task performance.

Patients and methods. To explore the hypothesis of DMN deactivation after methylphenidate administration, we conducted a systematic review of the literature.

Results. After a systematic search, 12 studies were included in this review. For eligibility, studies were required to measure the effects of methylphenidate administration on the DMN activity. Eleven studies showed evidence of MPH-induced improvements in brain areas related to DMN. The results suggest a normalization of brain circuits in individuals with DMN dysfunction.

Conclusions. Our preliminary findings strongly suggest methylphenidate improves DMN dysfunction presented in ADHD and other neuropsychiatric disorders. Further studies are needed to better understand this effect and expand comprehension of methylphenidate action mechanisms.

Key words. ADHD. Attention deficit/hyperactivity disorder. Default mode network. DMN. Methylphenidate. Neuroscience. Psychopharmacology. Resting-state.

 

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