Introducción La cefalea es un síntoma frecuente tras el ictus isquémico agudo. Su identificación y diagnóstico constituyen un reto por el perfil de paciente y los criterios diagnósticos actuales de esta entidad. Los objetivos del estudio fueron determinar la prevalencia de cefalea atribuida a ictus isquémico y su forma persistente, y analizar las variables clinicodemográficas y el grado de cumplimiento de los criterios de la Clasificación Internacional de Cefaleas (ICHD-III).
Pacientes y métodos Es un estudio observacional analítico de cohortes prospectivo de pacientes ingresados con ictus isquémico agudo en la unidad de ictus de un hospital de tercer nivel en un período de 12 meses.
Resultados Se incluyó a 244 pacientes con ictus isquémico agudo (el 59,8%, varones; edad media: 71 ± 12,8 años). El 23,2% presentó cefalea en el momento del ingreso o bien en las primeras 72 horas y el 12,5% de ellos presentó cefalea persistente atribuida a ictus isquémico. El 62,5% cumplió los criterios diagnósticos de acuerdo con la ICHD-III.